Requiere Hidalgo "Ley Anti-Chapulín"

* Hidalgo debe seguir ejemplo de Baja California.
* “Ley Anti-chapulín” impide a políticos brincar de un cargo a otro.
* No estaría mal una “Ley-anti-cínicos” y otra “Anti-trapecistas”.
* LOS DE HIDALGO, SENADORES GENEROSOS

Sirviendo a los intereses del Partido Acción Nacional y pese a las deficiencias en la iniciación de su vigencia, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de Baja California, decidió declarar vigente el artículo 42 de la Ley Electoral del Estado y anular la candidatura del priista Jorge Hank Rhon al gobierno de la entidad.
Dicho artículo al que llaman en aquel estado “Ley Anti-chapulín”, impide a Jorge Hank y a cualquier otro, ser candidato a un cargo de elección popular, antes de concluir su periodo, si es que también ocupa otro puesto que igualmente sea electo por sufragio libre, secreto y directo de la ciudadanía.
Es decir que el artículo 42 prohíbe que un presidente municipal, diputado local, regidor, síndico o gobernador, antes de concluir su periodo se separen del cargo para buscar otro cargo en el ámbito local, si la posición que ocupan es federal, si se permite.
Es el caso de Jorge Hank Rohn, que siendo alcalde de Tijuana y antes de concluir el periodo para el cual fue electo, pidió licencia para contender por el cargo de gobernador del estado.
Sin embargo se ha hecho notar, una serie de inconsistencias en el proceso legislativo efectuado para reformar dicho artículo, que lo harían inaplicable, pero ello tendrá que resolverlo el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, porque existen sospechas de que el tribunal local de Baja California, está al servicio del gobierno panista y quiso “sacudirse” a Hank Rohn para no corres el riesgo de perder la gubernatura, así como en otros estados están los tribunales a las órdenes del PRI o del PRD.
Y esto viene al caso porque si en alguna entidad hace falta una “Ley Anti-chapulín” para evitar que los servidores públicos y los representantes populares brinquen de un cargo a otro como si fueran buenos para todo, es en el Estado de Hidalgo, pues en cada elección, son los mismos rostros, pues como el poder se concentra en muy pocas manos, se repiten y se vuelven a repetir los candidatos.
Es el caso que en la elección federal del 2006, en el Congreso del Estado, cuatro diputados locales en funciones, solicitaron licencia para contender como candidatos, María Oralia Vega, José Edmundo Ramírez y Guadalupe Muñoz Romero, lo hicieron aspirando a una diputación federal y Rodolfo Alejandro Chavero lo hizo buscando una senaduría.
Ni Muñoz Romero ni Chavero Borjorquez lograron su objetivo, al recibir ambos priista y panista, respectivamente, el rechazo de la ciudadanía en las urnas, pero aun así son ejemplo de lo que en Baja California califican de “políticos chapulines”.
Ejemplos hay más, sobretodo en el Congreso del estado, donde José Guadalupe Rodríguez Cruz es diputado local, pero antes fue presidente municipal de Tula de Allende y antes también fue diputado, brincando de un cargo a otro y regresándose al primero.
Así lo hizo en su tiempo José Antonio Tellería Beltrán, que pidió licencia y dejó la curul para asumir la alcaldía de Pachuca; Pablo Octavio Olvera dejó la diputación para ser alcalde en Huasca de Ocampo; Juan Manuel Sepúlveda se separó de la coordinación del Congreso para presidir el Ayuntamiento Pachuqueño y después no concluyó su periodo como diputado federal para regresar al estado como Procurador de Justicia; Ernesto Gil Elourduy era representante popular por Pachuca cuando decidió irse de candidato a Senador.
Eso nada más en lo referente a cargos de elección popular, pero si a chapulines vamos, hay están casos como el de Omar Fayad, que lo mismo ha sido Procurador, que secretario de Educación, primer comisionado de la Policía Federal Preventiva, diputado federal y alcalde de Pachuca.
Actualmente algunos presidentes municipales como Miguel Ángel Montiel, de Epazoyucan; Joel Nochebuena Hernández, de Atlapexco; Moisés Cornejo Barrera, de Tezontepec de Aldama; Víctor Cardozo Camargo, de San Salvador y Juan Manuel Cárdenas Oviedo, de Tula de Allende, ya se promueven como aspirantes a una diputación local, todavía no terminan su periodo y algunos ni siquiera buenas cuentas han entregado y ya están pensando en dejar la alcaldía.
Ello se evitaría con una “Ley Anti-chapulín” como la que tanta controversia ha causado en Baja California.
Pero si se llegara a crear, no estaría mal que los diputados locales de paso incluyan una reforma que se llame “Ley anti-cínicos”, pues volviendo al asunto Chavero, su caso es notable, pidió licencia para ser senador, pasaron los meses y volvió como diputado local pero solo unas semanas debido a que volvió a separarse del cargo para buscarla de presidente del comité del PAN o de delegado de lo que sea, lo que muestra que lo que menos le interesa es el voto popular, al cabo que el es plurinominal.
Araceli Velásquez Ramírez, podría ser ejemplo de ambas cosas, pues siendo diputada local, pidió licencia unos meses y se fue como diputada federal a terminar el periodo que dejó inconcluso Jorge Romero Romero y después de ello volvió otra vez de legisladora local.
No hace mucho al negociar la Reforma Electoral, los dirigentes de los partidos políticos discutieron la posibilidad de incluir un artículo que fuera algo así como una “Ley Anti-trapesismo”, para evitar casos como los de Daniel Ludlow Kuri, que inmediatamente después de renunciar a su militancia en el PRI, fue candidato a diputado federal por el PAN.
“Trapecistas políticos” que además sean cínicos también los hay, ahí está el caso de Plinio Islas Olivares, alcalde de Huehuetla, que siendo del PRI, renunció y se fue de candidato a presidente municipal por el PRD y una vez que ganó y tomó posesión, dimitió del PRD y se puso a las órdenes de los priistas.
Pablo León Orta, militando en Convergencia aceptó ser candidato a diputado local plurinominal por el PRD y en cuanto asumió la curul, se declaró independiente; Jerusalem Kuri del Campo, prima de Daniel Ludlow Kuri, también es diputada local por la vía plurinominal, forma parte de la fracción parlamentaria del PVEM cuando ni ecologista es, pero en realidad milita en el PRI.
Si los políticos son cínicos o maestros en el arte del trapesismo político, ese es su problema, al fin y al cabo allá ellos y quienes decidan otorgarles su confianza a través del voto, sabiendo que cambian de camiseta o que poco les importa el sufragio, pero que sean “chapulines” eso si no, porque entonces dejan proyectos, promesas y compromisos incumplidos y entonces si se perjudica a los votantes.
Por ello es importante se analice con seriedad la posibilidad de que en Hidalgo se siga el ejemplo de Baja California, para evitar más casos de alcaldes que quieren ser diputados y viceversa antes de terminar o acelerados que ya piensan en ser gobernadores, cuando aun ocupan un cargo de elección popular local.
SENADORES GENEROSOS
Lentamente el Instituto Federal Electoral comienza a hacer pública la información relativa a los nombres de personas y empresas que contribuyeron con donativos a las campañas presidenciales del 2006 y sobresale de entre los priistas, la aportación de tres millones de pesos efectuada a la campaña de Roberto Madrazo Pintado por Jesús Murillo Karam, ex-gobernador hidalguense.
Otro político de la entidad que también aportó a una campaña presidencial, pero a la de Andrés Manuel López Obrador, es José Guadarrama Márquez, que según el informe del IFE, inicialmente dio 950 pesos y luego 193 mil pesos.
Vaya que son generosos los senadores hidalguenses, a eso se le llama regalar dinero a manos llenas.