Hay avances, pero muchos proyectos están en espera

* 2º Informe, sin ceremonias fastuosas.
*Turismo y Obras Públicas, los rubros con mayores pendientes.
* Colonos de la 20 de noviembre dieron la mala nota.
* Bien “domada” la oposición.

En cumplimiento a lo dispuesto por la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Hidalgo, que lo obliga a acudir a la sesión de apertura del primer periodo ordinario de sesiones, el gobernador del Estado Miguel Ángel Osorio Chong, acudió ayer a la sede del Congreso local, a presentar por escrito, un informe detallado del estado que guarda la administración pública y un resumen de las obras y acciones emprendidas por su gobierno durante el segundo año de su gestión.
En medio de un discreto operativo de seguridad que garantizó la tranquilidad de la ceremonia, el jefe del Ejecutivo del estado, acudió al palacio legislativo acompañado de algunos integrantes de su familia y la totalidad de los secretarios que conforman su gabinete, frente a quienes pronunció un mensaje de 18 minutos, en el que destacó los avances logrados por su administración en los últimos doce meses y habló de los proyectos que habrán de ejecutarse este año para impulsar el pleno desarrollo de la entidad.
Miguel Osorio Chong arribó al Congreso del Estado poco antes del medio día, encontrando a las puertas del legislativo, a un grupo de vecinos de la colonia 20 de Noviembre, una de las más marginadas de la capital del estado, quienes con mantas y pancartas lograron llegar hasta ese lugar con el argumento que de acudían a felicitar al mandatario, pero en realidad se manifestaban por el olvido que viven en la zona poniente de Pachuca, donde carecen de los más elementales servicios en sus hogares, por lo que decidieron manifestarse, aunque por fortuna lo hicieron de manera pacífica.
Después de escuchar por unos minutos a los manifestantes, el gobernador ingresó al recinto, donde entregó el informe y sus respectivos anexos, a la presidenta del Congreso por el mes de abril, Jerusalem Kuri del Campo, diputada plurinominal y sin distrito, que pertenece a la LIX Legislatura al haber sido incluida en las listas de representación proporcional por el Partido Verde Ecologista de México, en una cuestionada alianza que ese instituto efectuó con su partido, el Revolucionario Institucional.
Casi de inmediato, el mandatario inició su discurso en el que destacó lo invertido por su gobierno en materia de educación, infraestructura carretera, hospitalaria y en la introducción de servicios públicos en todas las regiones del estado, así como “el compromiso cumplido de impulsar con la ciudadanía, la ley de Transparencia y Acceso a la Información” y las “condiciones de gobernabilidad y paz social” en las que se encuentra el estado.
Dio cuenta “del trabajo, de los resultados; no de un gobierno, no de una administración, doy cuenta de lo que juntos, todos, a lo largo de este año, hemos logrado”, acerca del programa de racionalidad y eficiencia en el gasto público y del incremento de la recaudación en un 32%, el aseguramiento de mil 300 hectáreas de tierra, el aumento en la producción agrícola, la creación de 12 mil 713 fuentes de empleo y realizó anuncios acerca de la implementación del Programa Estatal de Nutrición y la construcción de un hospital de especialidades.
En su mensaje, reiteró que su gobierno mantiene “una relación respetuosa y de colaboración, con todos los presidentes municipales” y con la administración pública federal, demandó el trabajo conjunto de todos por el bien del estado y más tarde anunció que próximamente enviará al legislativo, la iniciativa de ley de Participación Social.
Sin duda alguna el informe dio cuenta de notables avances en muchas materias, en otras seguramente que el debate en las posteriores visitas del ejecutivo al Congreso, podrían ser intensos, pues si bien se habló del impulso a 24 proyectos turísticos y el rescate de 11 centros históricos en igual número de municipios, los resultados en el rubro de turismo son desalentadores, pues esos rescates a los que se refirió el mandatario, están todavía en el papel, es decir que habrá que realizarlos para poder conocer los resultados.
Lo mismo ocurre en muchas cuestiones de obra pública, pues parte de lo informado se encuentra todavía en proceso y es ahí donde los legisladores si asumen su papel con responsabilidad, deberán poner mucha atención, pues mientras en muchas zonas se inauguran puentes vehiculares y caminos, los trabajos que ejecutan las constructoras dejan mucho que desear y ejemplos los hay bastantes, baste con analizar lo que ocurre al término de una etapa y el inicio de la siguiente en el Río de las Avenidas, donde en varias ocasiones se ha tenido que derruir lo que se creía ya concluido.
Tan solo en los últimos meses se tuvo que reponer la construcción del distribuidor vial El Tephé que por diversas situaciones no ha podido ser inaugurado, como si lo fue el puente vehicular de Tula de Allende, en el que a pesar de haberse invertido más de 28 millones de pesos, a los 20 días de su apertura ya es objeto de diversas modificaciones, debido a que la mala planeación del proyecto, no consideró que un carril de circulación por cada sentido, no sería suficiente para el flujo de autos que ahí transitan y en el cual se trabaja para retirar el camellón y ampliar el arroyo.
La red carretera, se afirmó, ha sido objeto de ampliación y mantenimiento en más de 3 mil 600 kilómetros, que bueno porque hace mucha falta, pero la realidad muestra gran cantidad de caminos en pésimas condiciones, algunos son intransitables y ello ha sido motivo para diversas protestas, como también las habrá en un futuro, sino se concretan proyectos de equipamiento en hospitales que se han terminado pero que no están en posibilidades de ofrecer un buen servicio, como ocurre con el nosocomio de Tlanchinol.
No se trata de contrariar lo ducho en el informe, pero si de acentuar que muchos de los avances son solo de carácter parcial, ejemplo lo es la autopista Pachuca-Tulancingo, en la que una amplia parte se encuentra terminada, pero la falta de pequeñas secciones, hace imposible su utilización y se mantiene cerrada, mientras que existen otros problemas sin resolver para la ciudadanía, como lo es la falta se suministro suficiente de agua en Pachuca, a pesar de que en los últimos meses se destinaron 500 millones para infraestructura hidráulica, pero que han sido insuficientes para dotar del líquido a las familias que siguen abriendo la llave en su hogar sin que salga nada.
Hay que insistir en que si hay avances, pero también muchos proyectos que están en espera, porque de nada sirve que se trabaje conjuntamente con los otros poderes y niveles de gobierno, para concretar por ejemplo la Ley de Transparencia, si todavía no existen las herramientas para llevarla a la práctica.
En los próximos meses, el gobernador volverá al Congreso para dialogar con los diputados en torno al informe y los resultados resumidos, son tres visitas más las programadas y habrá que seguir con mucha atención la actuación de los legisladores, que tienen el deber de hacer notar, si acaso lo informado concuerda o no con la realidad y de sumar su trabajo a la consolidación lo que se ha caminado, aunque sea solo a medias.
BIEN DOMADOS
Quienes se portaron muy tranquilitos durante la entrega del informe y el mensaje del gobernador Osorio Chong, fueron los diputados de oposición pertenecientes al PAN, PRD, PT, PVEM y el “Independiente”, quienes al ser cuestionados por los medios de comunicación en torno a su opinión del documento, guardaron sus bravuconadas para otra ocasión y solo atinaron a decir e insistir, que la estructura era nueva y que todo había estado bien.
Contribuyendo a una pluralidad todavía “en pañales”, se le permitió responder el mensaje a una legisladora presuntamente de oposición, del partido verde, pero en realidad priista de corazón, en tanto que a los diputados del PRD Juan Ortiz Simón y Tatiana Ángeles Moreno, ni siquiera se les facilitó la entrada al lugar en el cual el mandatario estatal se entrevistaría con los reporteros.
Tal situación demostró una vez más, el que tan domados se encuentran, por no decir alineados, los diputados que se dicen opositores, pero que en realidad confirmaron que el control del congreso sigue siendo férreo por parte del PRI, que junto con el verde tienen en la legislatura una mayoría mucho más que aplastante.